martes, 23 de diciembre de 2008

Empate con polémica.La Orden reclamó tres penaltis durante su partido con el Pozo.



La Orden y el Pozo del Camino, no hicieron nada del otro jueves para entretener a los aficionados que acudieron a presenciar el partido. En los prolegómenos del mismo, se guardó un minutos de silencio por el fallecimiento de Manuel Emilio Contreras, padre del jugador Contreras y tesorero del Pozo del Camino.

Los contendientes, a tenor de sus méritos, firmaron un empate a un gol que se puede considerar justo, aunque si el colegiado, que expulsó con cierta rigurosidad al local Miguel, hubiera señalado los tres penaltis que le reclamó el equipo capitalino, el primero del portero sobre Pedro, otro por manos de un defensa en el último minuto y el del agarrón a Darío, cuando el choque había entrado en la recuperación, tal vez el resultado final hubiera sido otro y restado trascendencia a la polémica que suscitó una actuación arbitral protestada por los componentes de La Orden.

Durante el primer periodo hubo muchas imprecisiones. Los dos equipos abusaron del pelotazo, mientras que dejaban muy claro que lo de entralazar jugadas no figuraba en el aburrido guión que desarrollaban para ofrecer un juego soso, a la vez que carente de sentido sobre un centro del campo y en el que los contendientes se fajaron en una lucha que no tuvo un dominador claro.

Las llegadas a las respectivas porterías se hacían esperar, siendo el Pozo del Camino el primero en avisar. Fue en el minuto trece por medio de un centro de Félix que se fue envenenando y acabó pegando en el poste. Tres minutos después, replicó La Orden con un remate de cabeza de Jorge que lamió el poste.

Poco a poco La Orden fue tomando la iniciativa para disponer de otra ocasión en el minuto treinta, pero Pedro, tras controlar un buen centro de Negro, se entretuvo demasiado y el meta forastero le robó la pelota.

Acto seguido lograron los capitalinos abrir el marcador. Fue por mediación de una falta bien ejecutada por Negro y ante la que el portero José Mari sólo pudo ayudar al balón a entrar en su marco.

La Orden había conseguido encarrilar un partido que se le complicó poco antes del descanso con la rigurosa expulsión de Miguel.

Tras reanudarse el juego, La Orden tuvo que aclimatarse a una inferioridad de la que su rival no supo sacar partida para inclinar a su favor la balanza del dominio.

Los intentos de aproximación del equipo forastero se estrellaban una y otra vez en el orden defensivo del contrario, aunque en el minuto sesenta y ocho pudo llegar el empate con un lanzamiento de falta de Javi Faneca, pero el balón lamió el travesaño.

Esta ocasión fue la antesala del 1-1 que, a la salida de un corner, estableció poco después Javi Faneca. La Orden no se arrugó por el contratiempo, disponiendo en el último suspiro de opciones para ganar, pero Ni Darío ni Pedro consiguieron anotar el gol.