Isla Cristina y Olímpica disputaron ayer el encuentro de la jornada; sin embargo, lo que podía ser un buen espectáculo tuvo el gran inconveniente de la lluvia, ya que un fuerte aguacero acompañó a ambos equipos durante casi media hora, lo que iba a dejar en mal estado el terreno de juego. Pese a ello, ambos equipos lo dieron todo, plantando cara a las inclemencias meteorológicas. Incluso la fuerza del agua hacía presagiar que el colegiado podía marcharse con los jugadores a los vestuarios y suspender la contienda momentáneamente, cosa que no sucedió.
El partido era de dominio alterno, con dos equipos en busca de la portería rival; no obstante, las ocasiones de gol no llegaban; poco a poco los verdiblancos fueron haciéndose con el dominio de la situación, pero la defensa costera se mostraba firme y sin fisuras, evitando que los balones le llegaran con peligro a Mateos, llegándose al descanso con el 0-0 inicial.
La segunda parte se afrontó con un terreno que acusó la fuerte lluvia caída en la primera media hora, que dejó el campo con muchos charcos, impidiendo la vistosidad del juego, pues el balón quedaba frenado sobre el césped.
En el minuto 53 llegó el 0-1, en un centro de Samu que remata Antón de cabeza, un tanto que no debió subir al marcador, ya que el valverdeño se apoyó en un contrario. En esta segunda parte el Isla Cristina se fue haciendo con el mando del choque, pero el gol encajado hizo mella en la moral de los locales, a los que le costaba mucho romper la defensa andevaleña. Una y otra vez las ocasiones se iban perdiendo; no se podía controlar el balón con facilidad y apenas llegaba peligro sobre la meta de Nacho.
La Olímpica, en esta mitad, se limitó a defender el tanto obtenido ante los pupilos de Manuel Juan Limón, que no encontraban la fórmula para conseguir la igualada. Inexorablemente fue pasando el tiempo sin apenas oportunidades claras, con lo que los valverdeños se llevaron tres puntos de oro en su lucha por el ascenso
